09 de Enero del 2017

Análisis de Aragami - PS4

Lince Work nos trae Aragami, donde podremos convertirnos en una sombra asesina mientras tratamos de descifrar un misterio del pasado y aquí lo vamos a analizar.

Estamos ante un juego de acción y sigilo donde encarnamos a Aragami, un espíritu vengativo, invocado al mundo por Yamico. Junto a ella descifraremos el misterio de su pasado, la caída de su imperio y la razón por la cual estos dos personajes se unen en esta travesía.

Nosotros somos un espíritu de la oscuridad y estaremos luchando contra la luz. Guardias de la misma nos impedirán el paso a nuestros objetivos, para ello contaremos con las sombras y un conjunto de habilidades a nuestra disposición para abrirnos paso por cada amplio nivel del juego.

Como se ha dicho al principio, al ser un juego de sigilo nuestro principal objetivo será pasar desapercibido por cada nivel, y como espíritu de sombra usaremos las mismas a nuestro beneficio, teletransportándonos a cada una sin ser vistos. Esto juega un rol muy importante en su jugabilidad ya que dentro de las sombras seremos semi invisibles y recargaremos nuestro poder para movernos entre las mismas, mientras que en la luz no solo seremos fácilmente descubiertos por el enemigo, sino que aparte perderemos poder para movilizarnos con las sombras.

Además tendremos un pequeño árbol de habilidades que podremos ir mejorando y para obtener nuevas a medida que coleccionemos ítems que nos darán puntos para ir desbloqueándolas. Estas habilidades se dividen en dos ramas, unas más ambientadas al ataque directo y otras más al sigilo.

Aragami posee una muy buena banda sonora y es visualmente impecable, aunque veremos algunos problemas gráficos y la cámara por momentos falla, dejándonos observar estos errores de forma más sencilla. Además se pudieron experimentar en muchísima ocasiones bajadas de FPS.

El juego posee una duración alrededor de 8 horas y contiene mucha rejugabilidad gracias a su modo multijugador, el cual consiste en volver a pasar el modo historia, pero esta vez de a dos jugadores. Aunque a primera instancia esto podría sonar algo repetitivo, la realidad es que se siente muy satisfactorio poder atacar y/o coordinar con un segundo jugador para evitar ser detectado.

Conclusiones

Aragami es un juego simple, que atrapa por su jugabilidad y no por su historia. Un juego sin vueltas de tuerca pero con una jugabilidad que nos retiene. Como juego de sigilo está muy bien logrado y puede ser disfrutado, aunque puede llegar a tornarse algo repetitivo. Aragami es un gran juego para aquellos que buscan nuevos títulos de sigilo, aunque si no son fanáticos de este estilo podrían darle una oportunidad sin arrepentirse.

Lo mejor

· Estética.

· Banda sonora.

· Jugabilidad.

Lo peor

· Historia.

· Se pudieron experimentar muchas bajadas de FPS.

· Puede llegar a ser algo repetitivo.

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