20 de Diciembre del 2014
Análisis de Thomas Was Alone - PS4
Thomas was…
Thomas was alone es un juego que combina plataformas y puzles, en el que básicamente tendremos que movernos por los distintos escenarios, con el único objetivo de llevar a nuestros cuadraditos hasta el portal que funciona como salida. Por ahí el primer pensamiento es “¿es en serio?, ¡el protagonista es un cuadrado!”. ¿Vale la pena? Espero poder aclararlo en este análisis.
… NOT alone
Si bien el juego arranca con la frase del título, y manejando al pequeño cuadrado rojo, a medida que vayamos avanzando tomaremos control de otros personajes de distintos tamaños, velocidades y formas geométricas; cada uno con sus propias características, las cuales deberemos combinar para que todos puedan escapar. Cada aspecto cuenta: algunas figuras serán más altas, otras más bajas, otras podrán saltar más alto e incluso hay una que puede flotar en el agua (uno de los impedimentos que nos cruzaremos en nuestro camino).
El juego está dividido en diez niveles, con varios subniveles en cada uno, en los cuales el objetivo es claro: llevar a nuestros protagonistas al portal. Las primeras partes son simples (sirviendo a modo de tutorial), tornándose más complicados progresivamente e introduciendo varios personajes juntos en un nivel; tendremos que utilizar las habilidades de cada uno de la mejor manera. Cuando tengamos a varios personajes bajo nuestro control, podremos cambiar entre ellos con un botón, tornando el manejo más fluido. Desde el primero hasta el último, los niveles están bien balanceados en cuanto a la dificultad, dándonos esa sensación de logro alcanzado, sin volverse en ningún momento frustrante.
¿Historia? ¿Qué historia?
Aunque parezca raro, el título trata de contarnos una historia, aunque de manera muy sutil. A medida que vamos jugando, en cada nivel hará acto de presencia un narrador, contando lo que van haciendo los personajes, a modo de argumento. Esa voz irá contando los pensamientos de cada uno, su personalidad, y como se relacionan entre ellos mientras están escapando de una nube de píxeles que los hace desaparecer. Puede parecer que pasa a un segundo plano, pero tiene varios detalles que, si se les presta atención, nos sacarán una sonrisa. Veremos distintos guiños a la cultura de Internet y referencias a íconos de la cultura popular, como la Kriptonita o los videos virales.
La banda sonora acompaña de la mejor manera, siendo en su mayoría composiciones en piano tranquilas y sofisticadas, las cuales ayudan mucho a crear ese ambiente relajado que el juego quiere transmitir. Obviamente no destaca en su apartado gráfico, partiendo de la base que los protagonistas son figuras geométricas, pero en este caso no empaña para nada la experiencia que el título brinda.
Conclusiones
Thomas was alone es un juego correcto, sencillo, que sabe donde está parado, y que sabe muy bien lo que quiere transmitirnos durante la experiencia. A través de su correcta jugabilidad, su música y su sutil historia, nos brinda un lindo momento. Vale la pena probarlo.
Lo mejor
- Jugabilidad.
- Música.
- Historia.
Lo peor
- Apartado gráfico modesto.
- Podría ser un poco más largo.
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