25 de Enero del 2024

Análisis de Alan Wake 2 - PC

13 años después del lanzamiento de Alan Wake, Remedy nos trae por fin la esperada secuela. Dos historias entrelazadas, cambio de perspectiva orientada al survival horror y ¿un musical? No siempre lo que demora su llegada es bueno.

En 1990, Twin Peaks cambiaría el entendimiento de las series de televisión para siempre, combinando elementos tan dispares como la comedia romántica, el género detective y el surrealismo. El resultado generó algo nunca antes visto, e inspiró a muchísimos artistas a crear historias innovadoras. Alan Wake es un ejemplo; ya en el primer videojuego hay contadas referencias a Twin Peaks. Y como no podía ser de otra manera, su secuela sigue el mismo camino. Pero, lamentablemente, así como la tercera temporada de Twin Peaks tardó 27 años en salir y, debido a ésto, la narrativa de la temporada profundizó en el surrealismo y dividió al fandom entre los que amaron lo construido y los que lo odiaron porque no entendieron nada, los 13 años de espera entre Alan Wake y Alan Wake 2 cambiaron el estilo narrativo, generando exactamente lo mismo que la obra de David Lynch. Eso sí que es un referención.

Tengo toda la sensación de que ya estaba tomada la decisión de construir al menos dos juegos que fueran secuela directa de Alan Wake, es decir Alan Wake 2 y 3. Para llegar a esta tercera hipotética entrega, primero se necesita un puente que conecte el primer juego con el último. Ese puente sería este Alan Wake 2, pero el problema es que el puente era demasiado corto, es decir no había mucho para contar de Alan en el lugar oscuro. Por eso, Remedy Entertainment tomó la decisión de estirar el periplo de Alan por este lugar lo más que se pueda, de ahí que la historia gire en una especie de ciclo, donde deberemos ayudar al señor Wake a escapar de este lugar.

No satisfechos con esto, este juego nos presenta a Saga Anderson, agente del FBI que llega a Bright Falls para detener a un culto que cometió un crimen atroz y parece estar conectado con crímenes previos por el modus operandi. Las cosas se complican con celeridad al toparse Saga con el retorno de Alan Wake, desaparecido hace 13 años (tranquilos que es un spoiler menor, esto pasa en la primera hora de juego). Entonces Saga deberá lidiar con el culto de Bright Falls, el regreso de Alan Wake y además un misterio que la rodea: aparentemente ella vivió en la ciudad pero no lo recuerda... ¿son reales sus recuerdos o son ficción? De esta manera el juego nos presenta la posibilidad de intercambiar la historia entre Alan y Saga hasta que lleguemos al eventual final, que demorará unas 20 horas aproximadas en dificultad normal.

Del lado de Saga la trama está bastante buena, poco a poco vas conociendo más del personaje y te va enganchando; querés saber quién es ella. El problema radica en que cuando te enterás de quién es y la historia de su pasado, esa magia del misterio se desvanece y surge la pregunta: ¿era necesaria la figura de Saga en esta historia? Yo creo que no, porque la misma es bastante similar a la de Alan en el primer juego: una persona llega a Bright Falls y empieza a luchar contra la oscuridad, empujado por el riesgo de perder a un ser amado (en el caso de Saga, su hija). Ni hablar de que las conexiones de Saga con su familia y Bright Falls son rarísimas, esto a causa del llamado "Remedy-verse" donde empezaron a conectar todos sus juegos a partir de Control, entonces ahora todo tiene que tener alguna relación con lo previamente creado, porque sí, para que la gente pueda decir "uhh, mirá, fulano es pariente de mengano que salió en Control".

Si a esto le sumamos que Remedy no tira toda la data por completo, tenemos entre manos una ensalada de teorías sobre la historia. Los invito a que miren cualquier video de Alan Wake 2 o Control y van a ver que todos los comentarios tienen su propia teoría sobre cómo todo se conecta. Es más, muchos youtubers que crean contenido del Remedy-verse dicen "me encanta la historia, y mi teoría es que..." y ahí radica el quid de la cuestión: nadie entendió un carajo sobre la trama de los juegos. Todos tienen sus teorías, sus conexiones, sus perspectivas, pero nadie parece poder ponerse de acuerdo. Todos entendieron algo diferente. Para mí eso no es una narrativa excepcional, para mí eso es una narrativa pobre, que cuenta las cosas a medias para confundir a la audiencia a propósito.

Tomen como ejemplo Breaking Bad, considerada la mejor serie de todos los tiempos. Todos podemos entender y seguir la trama. Los momentos de gran impacto se dan cuando sucede algo que no esperamos, pero toda la serie tiene un tratamiento narrativo excepcional. El universo conectado que esta construyendo Remedy no tiene nada de eso, meten tantos personajes nuevos y quieren que todo tenga relación, que terminan confundiendo a la audiencia.

Si a esto le sumamos la trama del lado de Alan, que incluye momentos tan absurdos como un musical, lo que obtenemos es un juego que, a pesar de durar 20 horas, prácticamente no cuenta nada. La trama general, es decir Alan escapando del lugar oscuro, apenas sí avanza algo. A esto hay que sumarle que para ver el verdadero final hay que jugar una segunda vez, es decir alrededor de 40 horas de juego. Ésto en un género como el survival horror, cuyos juegos se caracterizan por ser cortos, deja más dudas que certezas sobre qué tipo de videojuego tenían en mente estas personas, sobre todo su líder creativo Sam Lake (a quien por cierto admiro, el dio la cara para el Max Payne original).

Ya que estoy hablando del cambio de género, el primer Alan Wake podríamos catalogarlo como un juego de acción en tercera persona, porque efectivamente tenía mucho combate. Esta vez Remedy pasó a "Survival Horror", aunque en realidad sólo acercaron la cámara a la espalda del jugador, al estilo Resident Evil 4, lo que complica la maniobrabilidad en ciertos combates. No sé si fue una decisión de diseño o es un error, pero los personajes se sienten poco responsivos en momentos cruciales.

Por ejemplo, si yo quiero esquivar un ataque, no puedo recargar mi arma inmediatamente después del esquive, la animación para recargar no arranca, tengo que apretar varias veces el botón hasta que por fin empieza la animación. Sobra decir que en un género donde te jugás la vida en cada combate, lo primero y principal es tener controles responsivos. Nunca a lo largo de toda mi partida pude sentirme cómodo durante el combate; por suerte no hay tanto combate como en el juego original, o al menos así lo sentí yo.

Al estar enfocado en el horror, se juega más con la ambientación, pero el problema que tiene este aspecto es que Remedy abusa de los jumpscares. Es bastante habitual que entres a una habitación y de la nada te aparezca una cara que cubre toda la pantalla y grita para hacerte asustar. Lo encuentro sumamente molesto porque, como digo, siempre te agarra desprevenido y te jode bastante. Además, si tengo que ser completamente honesto, no creo que haya otro elemento que se pueda relacionar con el survival horror además de este aspecto. Munición siempre vas a tener a mano, y cuando morís es más por un descuido de no haber analizado el escenario de combate que otra cosa. Lo único que genera verdadera tensión son esos jumpscares de mierda. No se ustedes, pero el survival horror es más profundo que un susto.

Alan Wake 2 incorpora un elemento que se llama palacio mental. En el lado de Alan está copado porque él necesita escribir una historia para escapar del lugar oscuro, entonces cuando lleguemos a ciertos escenarios, deberemos escribir una idea nueva para alterar ese escenario y poder avanzar. Del lado de Saga, el palacio tiene un tablero de evidencias, donde podemos poner los trozos de evidencia que vamos recolectando de cada entrevista o explorando el mapa, pero muy pocas veces se usa para avanzar en la trama. Entiendo que la lógica sería que al sumar la evidencia, Saga llega a una conclusión que le permite deducir el próximo objetivo de la historia, pero en realidad esto sucede muy pocas veces y lo que termina pasando es que recolectás un montón de evidencia al pedo, y agregarla o no al tablero no cambia nada.

Algo que me sorprendió para mal en Alan Wake 2 es la cantidad de errores que tiene, a pesar de haber pasado un buen tiempo desde su estreno. Por ejemplo, yo instalé el juego en un NVMe, que son los discos más rápidos del mercado para PC. El tema es que al ejecutar el juego, me salía un cartel de que el mismo estaba instalado en un disco duro y eso podía traer problemas de rendimiento. Obvio que me parecía absurdo este error, asi que decidí ejecutar el juego de todas maneras, y me encontré con errores donde ciertos diálogos o animaciones no iniciaban y efectivamente quedabas bloqueado, sin poder progresar. Tuve que instalarlo en un SSD y ahí el problema se arregló, pero ahora lo que pasaba era que las pantallas de carga se cortaban, y Remedy no tuvo mejor idea que meter diálogos en estas pantallas, que por supuesto salían todos cortados porque el juego estaba cargando desde un disco que es más lento.

En otro momento estaba intentando resolver un rompecabezas opcional donde tenemos que poner muñecos en determinados dibujos, basado en un poema. Yo no sabía que me faltaban muñecos para resolver el poema, entonces cada vez que ponía muñecos el juego se trababa y no podía salir del rompecabezas, forzándome a cerrar el juego y cargar desde una partida anterior. Estos errores me obligaron a guardar seguido, por miedo a toparme con otro error inesperado que me cague la partida. Quizás éste era el verdadero survival horror después de todo.

Por último quiero mencionar que los gráficos de este juego son alucinantes. Remedy ha logrado crear texturas de alta resolución que se ven espectaculares, sobre todo las animaciones faciales que, dependiendo el ángulo de la cámara, se hacen indistinguibles de actores reales. Bravo por eso. Lo malo de esto es la pésima implementación de Ray Tracing en la historia de Saga Anderson. Me parece que Remedy creó primero toda la historia de Alan, porque en esa parte el juego anda impecable, y los efectos de Ray Tracing ayudan a sumergirte más en este mundo de oscuridad, donde la linterna hace la diferencia.

Por el lado de Saga, lamentablemente el rendimiento se cae a pedazos. Menos de 30 FPS con una RTX 3080 Ti, 32 GB de RAM y un Ryzen 7 7700X con DLSS activado en calidad, y luego una leve mejora poniéndolo en equilibrado. Esto es totalmente inaceptable y, una vez más, la gran prensa de videojuegos hizo la vista gorda en ésto, lo cual para mi es muy grave porque los reflejos en los espejos sólo se activan si tenés Ray Tracing junto con Path Tracing en calidad media como mínimo. Esto también me parece lamentable, no le costaba nada a Remedy agregar reflejos sin tener Ray Tracing activado, porque las técnicas para crear reflejos existen desde hace más de 20 años en la industria de los videojuegos.

Es como que te obligan a activar RT para obtener los mejores gráficos, pero a la vez no se toman el tiempo de optimizar la experiencia. Y no hay excusas para esto, porque hace poco jugué Avatar: Frontiers of Pandora (los invito a leer la review acá en PlayNoMore) y ese juego implementa Ray Tracing de forma nativa y el rendimiento es alucinante, además de que ese es un mundo abierto; Alan Wake 2 está divido en mapas, no es un mundo abierto, por lo tanto no hay excusas para no optimizar el rendimiento.

Conclusiones

Después de años de espera, Alan Wake 2 se estrenó, y el resultado es más mixto de lo que me esperaba. Por cada detalle copado hay una contraparte negativa, casi como una referencia a la dualidad entre luz y oscuridad del juego. Unos lo van a amar, otros lo van a odiar, pero yo no puedo pensar por los demás, yo tengo que dar mí veredicto y decirles que este juego no pudo estar a la altura de lo que generó. Eso no lo hace un mal juego para nada, pero tampoco es algo que recordaremos a futuro. Una trama cada vez más compleja por el Remedy-verse, controles poco confiables y una optimización sorprendentemente pobre, hacen que Alan Wake 2 sea sólo recomendable para aquellos que ya están metidos en la franquicia y que les sobre la guita, porque cuarenta dólares hoy en día en Argentina son una torta de plata. A los demás les digo que hay mejores juegos en los que invertir.

Lo mejor

· Por fin se estrenó Alan Wake 2.

· Una presentación impecable, con altos valores de producción.

Lo peor

· Controles por momentos poco responsivos.

· Serios problemas de optimización.

· La falla absurda del SSD puede traer problemas a quien no tenga otro disco en la PC.

· Historia cada vez más compleja y difícil de seguir a causa del Remedy-verse.

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